Ledicia Cafe

Hemos estado tres días en Coruña y hemos repetido. Ella es encantadora, súper atenta, la cafetería bonita y acogedora. Hace un chocolate a la taza q madre mía! El café tb necesario, jajajaja. Fan ABSOLUTA de las magdalenas de jengibre y la tosta de hummus de remolacha. Y precios razonables! Lástima no tener nada ni parecido en Bilbao, q los precios están por las nubes. T e n é i s que ir.. en serio. Gracias por haber creado un sitio tan especial.

Estábamos de viaje por Coruña y solo nos faltaba por encontrar una cafetería tranquila, agradable y con personas simpáticas donde disfrutar de lo que más nos gusta un buen café. Y fue justo en esta cafetería donde encontramos todas esas cosas. La única pega y no es hacia ellos, si no hacía nosotros, es que la encontramos el último día de estar allí. 💯% recomendada.

Local-cafetería preciosa y con mucho encanto en el orzan, a un paso de plaza Pontevedra. Nada más entrar notas su ambiente acogedor y cálido, huele riquísimo a pasteles y chocolate caliente. Personal super amable y super atenta. Pastelería vegana muy rica. Nos pedimos chocolate pequeño (casero muy rico) y pastel de arándanos y limón, super sabroso y esponjoso.

Llevo intentando ir ni sé cuántas veces y nunca lo encuentro abierto. Mi chico vive al lado y tampoco ha conseguido encontrarlo abierto. Hoy pasamos a las 10 y nada, vimos en el horario que abrían a las 11, pasamos a las 11 y pico y seguía cerrado... Edito mi reseña: al fin lo encontramos abierto, y es para ir y repetir. Trato excelente, un local precioso, diferente y original, repostería casera para chuparse los dedos y la música es simplemente maravillosa y al volumen ideal. Hacen falta más locales así, que cunda el ejemplo.

Es la cafetería perfecta. El trato es inmejorable. Tiene una carta de tés con opciones para todos los gustos, el café está increíble (y es de comercio justo) y tiene leches vegetales. Además la repostería es casera y hay opciones veganas de salados y dulces. Perfecto para ir a trabajar con tu portátil por el ambiente: tranquilo y acogedor. La estética del local es preciosa y siempre tiene alguna exposición de fotografía o pintura que son muy interesantes.

El Ledicia Café es uno de esos sitios especiales donde te sientes muy cómodo. Será por el aroma que desprende cada horneada de magdalenas o galletas, por la calidez de la decoración, por su música. Quizás sea por esa sonrisa y el "¡Hola niños! ¿que os sirvo?" tan característico de Leticia a la hora de darnos la bienvenida a su (y nuestra) casa. Supongo que será un poco de todo. Lo cierto es que quien va por primera vez está destinado a volver.