Taberna

Probamos este sitio un par o tres de días después de que abrieran. La comida está rica, las porciones muy generosas, incluso demasiado (sobre todo si no te avisan) El servicio tendrán que mejorarlo, aunque les doy el voto de la novedad, pero tardaron muchísimo sin aparente necesidad. En la terraza se está muy bien, aunque depende de dónde te sientes puedes salir empapado por los chorrillos del agua pulverizada. En general, le doy muy buena nota porque la comida estaba rica que es lo más importante.

Dan un menú simple (cuatro primeros y cuatro segundos). Algo sencillo, pero rico, y limpio. Comida tradicional sin excesos de grasas ni sabores recargados. Un sabor nítido y sin pretensiones. Por otro lado el personal es de trato muy agradable y las instalaciones, son grandes filigranas, hacen que ir, comer, tomar un café o relajarte en su terraza trasera sean ratos agradables.

Estupendo sitio para tomar unas raciones, amplio tranquilo y LIMPIO nada masificado, por lo que no hay que esperar mucho, también dependerá del día y la cantidad de gente que haya, a nosotros nos han atendido rápido y bien. Hemos pedido varias raciones pero la que más nos ha gustado ha sido la de choco al ajillo, pero tienen también una zanahoria aliñada muy rica. Los postres son caseros al menos los que nosotros hemos tomado. Y el café está muy rico. Las personas que lo llevan que son sólo dos, se ve que lo hacen lo mejor que pueden y le echan mucho empeño. Lo recomiendo 💯 x 💯