Minyam

Un descubrimiento inesperado. Viviendo en la zona tantos años, me arrepentí no haber estado antes. Las tapas súper, delicioso todo, el trato, el servicio también muy bueno. Llegamos muy tarde casi 15 minutos antes de que cierre la cocina, pero nos prepararon lo que pedimos rápidamente y con mucha atención. Repetiremos seguro! Highly recommended 👌

Es un sitio súper agradable, con platos originales y mucha calidad en las viandas.. el personal muy atento y diligente, el precio acorde a la calidad y elaboración de los platos, y por la noche te puedes quedar después a tomar un cóctel sin presión de que te echen... muy muy recomendable y acogedor..

Es la segunda vez, que vengo y la primera vez salí muy contenta. Esta no tanto. De entrante pedimos las berenjenas en tempura que estaban muy buenas y unas bravas que no valían nada. No entiendo pq es tan difícil en este país hacer unas buenas bravas. Tardaron más de 20 min para traernos unas patatas recalentadas con una salsa pésima. Los segundos correctos. El abanico ibérico bueno, el magret de pato tb y el rodaballo un desastre. Era un rodaballo individual que no tenía carne por ningún lado pero que acabaron de destrozarlo con una salsa gelatinosa sin sentido que le pusieron por encima.., no se si intentaron hacer algo al estilo donostiarra.., pero en fin un desastre. Las verduritas salteadas de acompañamiento muy buenas. Creo que si vienes aquí es para probar su arroz vulcano y no más. Por lo demás el.servicio muy amable.

Un restaurante para tomarte algo y picar o bien para comer platos principales y el restaurante está decorado muy elegante y los trabajadores son bien agradables. Las patatas bravas estaban bien buenas. Las croquetas sabían bastante a bechamel y poco a jamón pero el rebozado estaba bueno. Los mejillones normalito. El camarero que nos a atendido muy atento y agradable y nos a servido rápido 👍.

Cocina Mediterránea adecuada en la Ciudad Barcelona en un barrio en expansión y crecimiento a 20 minutos de la zona céntrica. Ambiente modernista con buena iluminación y una muy buena barra para degustar cócteles pero con un inconveniente, vinculado a los olores ambientales, responsabilidad del ayuntamiento y el tratamiento de las tuberías que impactan directamente en tu experiencia gastronomica. Los platos están bien logrados y con buena creatividad, el chef ha desarrollado un ahumador con el que aromatiza los arroces, aunque no destaco ningún plato en particular de 7 que deguste. El lugar requiere en fin de semana reserva previa ya que siempre está con comensales en horarios picos. Ideal para almuerzos o cenas, familiares, de trabajo o con grupo de amigos.