Museo Maritim De Barcelona - Lonja De San Cristobal

Beeindruckendes Gebäude und noch spannender war die riesige königliche Galeere. Faszinierend fand ich die große Frachtwaage gleich beim Eingang. (Traducido por Google) Impresionante edificio y aún más emocionante fue la enorme galera real. Me fascinó la gran báscula de carga situada justo en la entrada.

Un súper plan familiar! Espetacular, desde el principio al final. Muy bien explicado, confortable y didático. Es uno de los lugares que pide una visita obligatoria, además de estar a 1 minuto da para de Drassanes y al final de la Rambla. El museo está en un edificio del siglo 14 con unas estructuras muy conservadas. Las piezas que están expuestas son una pasada! Muy barato, y hay promoción para tardes de domingo.

Fui a visitar la exposición sobre Pompeya con la experiencia de realidad virtual y merece la pena, super chulo! Luego un domingo por la tarde aproveché de la entrada gratuita para visitar el museo en sí; super bien hecho, con maquetas de barcos y veleros que hacer recorrer la historia, merece la pena

El Museo Marítimo de Barcelona está alojado en la antiguas Atarazanas Reales, (les Dressanes) que eran algo así como los astilleros de la edad media y primer siglo de la edad moderna. El edificio en sí merece una vista. Es un enorme edificio industrial de estilo gótico civil, con varias naves paralelas sostenidas por amplios arcos formeros, ligeramente apuntados. El museo expresa muy bien la relación de Barcelona con el mar a través de los tiempos. Puede que con más enfasis en las relaciones marítimas comerciales. Pero la pieza estrella es una reproducción casi perfecta de la galera real de Juan de Austria en la batalla de Lepanto. Esta réplica se construyó aqui mismo a cargo de carpinteros de ribera, similar a como se construyó en su dia la galera en estas mismas Atarazanas. El Museo tiene otro barco visitable que está en el puerto, a poca distancia del museo. Es el pailebote Santa Eulalia que, además de ser visitable, sale a la mar todos los sábados Una visita muy recomendable en Barcelona.

Uno de mis museos favoritos, hermoso el lugar y se puede aprender muchísimo. La exposición es bastante grande, nos encantó la sala de la Galera Real. Hay una cafetería muy mona, y un pequeño jardín con muchos pajaritos. Me gustó la experiencia. Con la entrada al museo viene una entrada gratis a un barco en el puerto, es chiquitito, pero había una sección donde enseñaban a hacer nudos.