Bar Castells

Relación calidad precio, increíble. El servicio, gente profesional, de oficio, de toda l vida. Los callos y la ensaladilla de primera, que puedo decir no guía Michelin ni Campsa ni Repsol, pero cenar por 20 euros con vino Rioja Crianza, para mi ha sido un experiencia que, seguro volveré a recibir.

Comida clásica de barrio y "tradicional" en un barrio lleno de turismo y gente que puede no valorar este tipo de establecimientos. No sólo clásica, sino de calidad y muy buena. Los precios para la zona están muy bien. Me alegra saber que aún quedan establecimientos que no ceden ante presiones culturales ni ante modas pasajeras, conservando los valores de lo que antes era clasificado como un sitio para tomar algo y comer, cenar o TAPEAR Sin ninguna duda, DIGNO DE REPETIR. Más aún siendo de la zona

Bar situado en la plaza Bonsuccés, 1. Disponen de terraza exterior (bien para los fumadores, mal para su salud). Nada más entrar vemos un mueble bar tallado a mano dando un ambiente antiguo. Conforme entras te encuentras mesas a ambos lados llegando a unas escaleras que te llevan a otro comedor y a los servicios. Este último comedor está decorado con radios antiguas dando una sensación de trasladarse a otra época. Los servicios estaban limpios. La comida está buena, he comido en sitios peores. La sangría un poco cara desde mi punto de vista. Aún así recomiendo visitar y disfrutar del momento. No aceptan tarjetas de crédito ni de débito.

Uno de los mejores bares de tapas de Barcelona, el motivo es sencillo: el precio x cualidad x ubicación es insuperable. Llevo años viviendo en el extranjero y cada vez que regreso la oferta gastronómica en Barcelona es más cara y menos tradicional. Habrán sitios con comida “más sabrosa” o “más modernos” pero no tendrán lo acogedor y tradicional de este sitio ni una buena relación calidad precio. Las tapas son frescas y caseras y el servicio es muy bueno.

Bar tradicional, muy buenos precios, buen servicio. El local me gusta mucho, mantiene una estética antigua lo cual hace que tenga su encanto y sea acogedor, está decorado con unos cuadros muy bonitos, etc... Entré a tomar unas cervezas, fue una visita breve, pero tengo claro que volveré, y probaré alguna de sus tapas. Me gustó mucho que tuvieran algo más de variedad de cervezas que muchos de los bares de Barcelona que se limitan a tener estrella Damm o moritz. Tienen voll Damm, moritz, San Miguel, estrella Galicia, guiness... No aceptan pago con tarjeta.