Bodega Pasaje 1986

Qué gran recomendación!! Platillos deliciosos, con ingredientes de primera, tratados excelentemente. El servicio súper amable. Nos ha encantado el guiso de rape con salsa azafrán y la terrina de pies de cerdo. Del postre destaca la torrija. Súper contentos de la gran recomendación, pasa a ser uno de nuestros nuevos restaurantes favoritos.

Nosotros tomamos una Cocacola, una clara, unos tacos de bonito curado, los calamares rellenos, costillar de cerdo con puré de patata ahumada, una tarta de chocolate y un café por 60€. Los tres platillos estaban buenos, a destacar sobretodo los tacos de bonito que tenían un sabor y textura sorprendente.

Fuimos por qué nos lo recomendó un amigo y la calidad del producto es muy buena. El chicharrón, diferente a lo que habíamos probado en otros sitios, no estaba mal, Las Oseas aliñadas… nada que ver con las andaluzas pero el pescado que llevaban exquisito ( qué pena que no hubiese más cantidad), Fue todo un puntazo que tuviesen pan sin gluten. Los sepionets, la escalibada, el secreto ibérico y la tarta de queso Payoyo, EXPECTACULARES. Cenamos en la terraza, las sillas son muy cómodas pero la mesa te impide poder estirar las piernas.

Comida muy agradable entre viejos amigos. El local no tiene especiales pretensiones, de hecho no es obvio encontrarlo si es la primera vez que vas. Toda la comida está muy bien cocinada y la materia prima está muy cuidada. El ritmo del servicio es bueno y los camareros muy profesionales. Nos sobró la música de ambiente hacia el final de la comida, el volumen y el tipo de música era algo intrusivo y afectaba a la conversación.