Palomar De Los Pobres

Pasaron 30 años antes de volver a comer en este restaurante, lo recordaba más sencillo, nada de lujos ni pomposidad. Llegabas y te servían un plato de frijol, cabrería acompañado de tortillas doradas a la parrilla, marinada con una deliciosa agua de horchata, si no mal recuerdo, ese era su menu. Hoy en día es un local muy bien instalado, con aire acondicionado y cierto glamour, tiene una carta amplia, con diversos cortes, entradas y antojitos. Todo se ve delicioso. En esta ocasión pedimos un paquete llamado parrillada plus, lleva arrachera, cerdo, pollo, chorizo español, costillas de cabrería y unas papas rebanadas con cubierta de queso gratinado, por supuesto, acompañada de una vasija con frijoles de la olla para que cada quien se sirviera al gusto, además las clásicas tortillas doradas. Con un ambiente 100% familiar, lo recomiendo ampliamente.

🏆 1era pero no será la última ocasión que visitaré el Palomo de los pobres, los platillos son muy abundantes, aguas por si eres de los que comen poco, ahora si eres de los que comen basto, créeme que este es el lugar indicado Los frijoles con carne, son increíbles, y los Cortes bien servidos suaves, jugosos y con buenas guarniciones por cierto muy buen servicio. Las tortillas son a mano. Y regresaré cuando pueda a este lugar.

Todo excelente en cuanto a comida, los cortes muy ricos y todos los complementos también, solo la atención es la que estuvo muy mala, a la mesera poco le importó atendernos y con cara de pocos amigos. Mis sobrinas pidieron varios complementos que jamás llegaron. Siempre que voy de vacaciones a culiacan visito esta cadena de restaurantes que nos gustan mucho pero esta vez me quede con mal sabor de boca. Aún así seguiré yendo pues hay varias sucursales donde te atienden muy bien. 😉

Cuando de degustar carne se trate ...Siempre voy al Palomar de los Pobres, me gusta el que se encuentra cerca de Palacio de Gobierno. Sus carnes asadas son de la mejor calidad y claro que por supuesto que en sabor igual. La variedad de platillos es amplia. No olvides probar el guacamole, las papas a la francesa, el queso fundido y por último su flan casero, la natilla mmmmm Desde que llegas te recibe calidamente su personal, además tienen amplio conocimiento de los platillos y te asesoran al momento de escoger. El lugar esta muy relajado, muy grato, cómodo, bastantes mesas, hay estacionamiento y esta céntrico. Olvidaba decirles que se puede tomar una cervecita jijiji.

Palomar de los Pobres— Siendo pobre, fue el primer lugar al que acudí para comer por primera vez en mi primer visita a Sinaloa. Nos ofrecieron una "cuponera" por $100 (efectivo), y se pagó sola con lo que pedimos entre dos, y aún nos sobran más cupones, muchos más. La comida estuvo muy rica, personal muy amable, precios razonables/baratos. Aceptan tarjeta, sólo que la cuponera es únicamente en efectivo. Dos personas comimos en $328.50 pero muy bien.

El lugar es de los tradicionales y más representativos para comer en Culiacán, su menú es básicamente frijoles con distintas variedades, quesos fundidos y por supuesto Cortes de carnes, cabrerias parrilladas y algunos platillos con pollo, los sirven acompañados de cebollas cambray, chiles troceados y papas fritas en su mayoría, en definitiva un gran lugar para comer en familia!

El servicio es regular - bueno, los precios son ligeramente elevados, sin embargo la comida es excelente. El único inconveniente que tuvimos fue que el agua de cebada estaba mala, ya sabía a cerveza y pues eso no va. Al momento de pedir la factura nos tardaron horas. Volviendo a la comida, todo estaba perfectamente guisado y el sabor fue sublime. La cabreria era exquisita y los frijoles estaban más que perfectos.