Borsalino

Antonio, el dueño y su mujer Julia Son dos personas estupendas llegué a las 11:30 y le pregunté si ya ponían tapas, la señora me dijo que todavía era muy pronto que si ponían desayunos. Entonces le dije, quiero un bocadillo o una tostada de York y queso, Ella respondió no tenemos de eso, aquí solo servimos desayunos, contundentes para trabajadores. Y así fue, me sirvieron un bocadillo con tomate rallado y tortilla francesa recién hecha, estaba riquísima. La decoración del lugar con las fotos del Albaicín de Puerta Elvira, Fray Leopoldo.. Café y bocadillo, 3,50€, sólo admiten efectivo

Antonio es muy amable y su señora también, las tapas son las de toda la vida,la verdad que por 6eu un menú hoy día es difícil de encontrarlo, y la calidad insuperable. La verdad que me he sentido cómo en casa, junto a su calidez humana, hacen que la experiencia sea única,nada que envidiar a restaurantes caros. Aprovechamos nuestro último día en Granada para descubrirlo, si lo llego a saber cómo allí todos los días. Además,nos dió una tarjeta por si volvemos,para llamarlo y se ofreció a hacernos la tapa que queramos,siempre avisando con tiempo,es un crack. Te debo una estampita de la Macarena, Borsalino. Saludos de tus amigos de Sevilla.

Venir a este bar es toda una experiencia. La amabilidad y trato cercano del propietario te hacen sentir como si estuvieras en tu hogar. Los precios son tan asequibles que casi no merece la pena cocinar en casa. La decoración y el ambiente no son nada sofisticados, pero eso también forma parte de su encanto.

Tal y como decían las reseñas en este sitio comes y bebes a un precio incomparable a otros bares y restaurantes de la zona. El personal es muy amable y gentil, con muy buen humor te atienden y te ponen tapas con tu bebida. Si tuviese que poner una pega, no se pueden elegir las tapas. Pero por la cantidad que te ponen y el buen humor que tienen, le doy 5 estrellas.