La Hacienda Alhamar

La antipatía elevada a niveles máximos. Tanto el propietario como el camarero son dos individuos que te perdonan la vida nada más mirarte. Si quieren conocer la famosa mala follá granadina no dejen de ir. Para colmo, falta de profesionalidad y unas tapas escasas y de conserva barata. Lo único bueno que tiene es que el local es bonito. No repito ni regalado

Primera experiencia en Lynus. No será la última. Magnífico. Cerveza muy fría y bién servida. Tapas estupendas-Melva, Anchoa con queso, un salchichón impresionante. Fritura impecable y bién presentada, sin sabor a aceite rancio, todo limpio. El camarero que nos atendió fue muy correcto en todo momento, rápido a la hora de atender. Sinceramente, no sé qué otra cosa se puede pedir en un bar.

Antonio el dueño te hará estar como en casa, lo mejor de su cocina la ensaladilla, el bacalao con verduras, los calamares en su tinta, y si quieres un consejo dile a Ana su mujer que te aconseje, y a la hora de pedir bebida el mejor tinto con Blanca en una buena Copa y con casera de botella, el mejor de Granada. Consejo, ir con tiempo hay pocas mesas, sino tocará estar de pie en la barra.

Local situado en la calle Alhamar del centro de Granada donde se puede ir a degustar tapas o a estar sentado como restaurante muy bien dirigido por el matrimonio formado por Antonio que está cara al público, como por su mujer Ana al cargo de la restauración. Muchas serian las recomendaciones pero me centrare en dos exquisitas delicias que hemos probado hoy: unos chopitos (sin la concha) a la plancha al estilo de la “abuela” excelentes, y unos lomos de cogote de merluza rebozados y acompañándose de espárragos blancos rebozados francamente deliciosos. Otro día os recomendaré otras delicias gracias Antonio y Ana. Sitio altamente recomendable

Tapa hecha con pan de hace dos días. Dueño con cigarro en la oreja que coje los colines con la mano y si le piden una ración de cañaillas y se cae una al suelo no pasa nada no se tira ni siquiera se lava sino que.se echa con las demás. Dan por supuesto que en una pareja es el hombre el que paga ...deprimente para no entrar