Restaurante Castrillo

Que espectacularidad de cocido! Un buen amigo nuestro de Leon nos había recomendado visitar este lugar como parada obligatoria, se lo agradecemos enormemente! Lo que más destacamos es el cocido y en especial su sopa! Nos dejó sorprendidos para bien! Muy rico también todo lo demás que hemos probado y el servicio excelente 5/5! Gran lugar con ambiente muy acogedor y tranquilo! Volveremos por ese cocido!

Lugar muy bien ubicado con las vistas preciosas y un servicio verdaderamente bueno. Muy simpáticos los camareros. La comida está buenísima. El cocido está bastante bueno y se puede repetir de lo que te guste hasta explotar. El postre también. Café . La verdad que merece la pena. Recomendación no desayunes.

Totalmente recomendable. El cocido maragato está espectacular, destaco especialmente la sopa. El camarero es simpatiquísimo y te ofrecen repetir todo lo que quieras (aunque no creo que nadie llegue a querer repetir porque ponen muy buena cantidad de comida). Los postres también están muy buenos. Además el restaurante es muy céntrico y tiene un encanto especial.

Hemos venido a ver León y hemos parado al ver sus buenas reseñas. Hemos comido muy bien y el trato de los camareros ha sido excelente, cercanos, profesionales, atentos... Hemos comido el menu alternativo. De primero puerros con cecina y bandeja de embutidos y de segundo los dos dados de vaca vieja(la carne deliciosa) y de postre natillas caseras

Especializados en cocido maragato y merecen su especialización, el cocido es magnifico, servido en tres vuelcos que puedes repetit las veces que quieras. El menú incluye el postre, que también es casero y el café. La ubicación es excelente, bajo unos arcos de la plaza mayor de León, un entorno precioso.

Fuimos a comer el menú de cocido y el alternativo. Súper recomendables ambos. En el de menú de cocido te dicen que puedes repetir de los tres vuelcos las veces que quieras. La verdad es que ya te cuesta terminarte lo que te ponen sin tener que repetir. En el menú alternativo los espárragos con cecina muy buenos, y las carrilleras al vino tinto exquisitas. Los dos postres, tanto la natilla como el de limón caseros y riquísimos también. El servicio de todos los camareros es de diez, súper amables y eficientes. Si quieres comer en León bien atendido, cantidad y calidad por un precio muy razonable no te lo pienses.