Hache Restaurante

Un restaurante ubicado en pleno centro de Madrid justo en frente al Palacio Real, unos platos Magnificos, arroces , paellas y muy buena carne. Lo recomiendo tanto en la calidad como en el precio. La relación calidad precio es muy buena. Y una magnífica atención tanto del personal como de sus propios dueños, por cierto personas excelentes.

El restaurante está ubicado en una plaza con un ambiente bohemio y desenfadado muy agradable. Su terraza es una delicia. La comida muy rica y el trato inmejorable. Sin duda repetiré y lo recomiendo. Sinceramente pienso que las personas que lo están criticando no han pasado siquiera por allí, de otro nodo resulta incomprensible.

ESPECTACULAR. El sitio es muy bonito, con una decoración muy cuidada y un estilo muy cálido. La comida riquísima, todos los platos y postre con un producto de calidad, perfectanente cocinado y elegantemente presentado. Pero lo que más nos ha gustado ha sido el trato recibido, tanto de los camareros como de los dueños, hacía mucho tiempo que no me encontraba tan a gusto en un restaurante. Volveremos en breve...

Cena 5 estrellas...con una ubicación privilegiada y un servicio impecable. Debo unas cuantas fotos...pero es que todo estaba tan bueno que devoramos los platos antes de fotografiarlos. Uno de nuestros anfitriones fue Francisco quien nos hizo sugerencias muy acertadas....el entrecot y el salmón en su punto y unos postres de muerte. Recomendado! Volveré y prometo hacer fotos... PD. Hemos vuelto y sigue todo impecable...ahora si la foto de algunos platos.

Hache es una mezcla de originalidad, buen gusto y calidad. Para empezar, la decoración es inmejorable: un sitio cálido, con muchos detalles y muy agradable por los tonos y la combinación de las luces. El detalle de las paredes también está muy bien. Los platos son originales, muy bien presentados y, en mi opinión, la cantidad es perfecta. Además, lo más importante: la comida está muy buena. Ha dado un gran giro desde que abrió hace meses. En cuanto al precio, creo que va muy acorde con la calidad. Por último, el servicio es muy amable y cercano. Te hacen sentir como en casa. He ido ya muchas veces a Hache y no dudo que volveré. Además, qué decir de la localización, en frente del Palacio Real... ¡una maravilla!