Lamucca De Prado

Sitio muy recomendable para ir a comer, con un ambiente relajado y un local con encanto. La comida está muy buena; nosotros probamos varios platos y recomiendo especialmente el risotto de rabo de toro, la pizza "La mallorquina" y el pollo al curry. La relación calidad-precio está bastante bien también y fueron muy amables al atendernos. Volveremos!

Entre para probar la Smash burger de Juan Dávila. Buen ambiente y atención correcta. Croquetas de Mamá: son croquetas contundentes con buena cremosidad, pero para mí gusto le falta un punto de sabor a Jamón. Smash burger Juan Dávila: resaltar que la hamburguesa tiene un aspecto benéfico donde donan parte de lo que cuesta la hamburguesa a investigar contra el cáncer. La hamburguesa en si es bastante pequeña y no veo que viniera correctamente smasheada. Resalta mucho el sabor del pepinillo sobre el resto de ingredientes. Lo único a resaltar son los hilos de cebolla. Tiramisú: la verdad que fue lo mejor buen punto de consistencia y cremosidad con mucho regusto a café, pero sin estar muy dulce.

Siempre un buen opción porque el precio y calidad y sitio esta bien. El menú tiene un buen selección, carne, pasta, pizza, ensalada, pokes y más.. (con opciones para vegetarianos). También hay muchos opciones para bebidas (vino, cocktails y más). El ambiente esta bien también (hay dos plantas, uno abajo con mucho luces y más intima. El precios están buenos por la calidad de la comida. Hay unos restaurantes de Lamucca en Madrid - y aquí siempre está ocupada (mejor con reserva para estar cómoda). Si estás buscando algo en el centro - aquí está muy muy bien

El sitio nos gustó mucho, bien decorado …. Aunque las mesas un poco pequeñas a nuestro parecer. La atención nos gustó mucho y la comida también. Pedimos la tabla de Ibéricos con quesos que nos gustó bastante y Pad Thai. El Pad Thai no nos terminó de convencer porque estaba muy fuerte y con mucho cilantro pero la opinión general es muy buena. Muchas gracias por hacernos sentirnos tan a gusto.

Me ha gustado mucho la decoración y se estaba muy fresquito debajo de uno de los ventiladores en pleno agosto. Camareros muy amables y atentos y la comida muy buena. Pedimos steak tartar y pizza hawaiana la cual nos ha sorprendido por la masa fina y crujiente y el toque sutil de sabor que le da la piña.

Restaurante con buena carta de comida internacional; podrás comer pizzas de autor, hamburguesas, comida mexicana… comimos unos tacos de rabo de toro, una ensalada Cèsar y una pizza Pollita. Todo muy rico. Muy bien atendidos por Miguel, que se preocupó de que todo estuviera bien y llegara rápido. De visita en Madrid; volveremos.