Carús

Servicio muy atento y agradable. Gran variedad de la carta, comedor bastante amplio. Poco tiempo de espera entre platos, la tortilla de picadillo muy buena, los pixines no nos convencieron. Sin embargo el chuletón muy bueno de sabor y de punto, y los dos acompañamientos muy ricos (tanto las patatas caseras como la ensalada). Sin duda merece la pena venir

Sitio de toda la vida donde siempre se come bien. Muy recomendable para ir con amigos, familia o negocio. Cuenta con salón interior y exterior. Tiene entradas por ambos lados de la calle. Por uno accedes primero a la terraza, y luego al interior, y por el otro directamente al salón principal. Hemos ido varias veces y todo lo que hemos pedido está exquisito. De entrantes tienen buenos callos, croquetas, zamburiñas y muchas otras cosas. De principales puedes irte por platos típicos asturianos (cachopo, fabada o verdinas), pescados o carnes. Todo esta muy rico. En esta ocasión pedimos las zamburiñas y el chuletón de 1KG para compartir entre 2. Las zamburiñas vienen 6 y tienen buen tamaño. El chuletón te lo pueden traer con la piedra y viene acompañado de guarnición de patatas fritas.

Salimos encantados con la comida. Menú del día variado y a buen precio. Las patatas con marisco estaban espectaculares, y los segundos igual, tanto la carne como el pescado. Buen trato, personal muy profesional. Lo único malo es que hacía algo de calor sólo con los ventiladores de techo, tendrían que revisar eso.

Restaurante gallego en Casa Quemada. Fuimos a comer porque tenemos un familiar en la residencia de en frente, y por darle una alegría. La verdad es que la atención es fantástica, no te falta nada, y son muy rápidos en atender. La comida está buenisima. Destaco las croquetas, los calamares en su tinta, y los torreznos. Aunque todo lo que se pidió estaba bueno. Sin duda, merece la pena si estás por la zona.