Pasteleria Pareli

NUNCA LES DI ESTRELLAS Hace años cuando vivía en Madrid (hasta el 2017), justo en el Barrio de Salamanca, esta era mi cafetería/pastelería preferida. Y es que me pillaba al lado de mi apartamento, por eso me encantaba ir a misa los domingos temprano, para luego salir a comer y a tomar algo aquí. La atención de las trabajadoras era estupenda, los productos eran frescos, la limpieza del local era inmejorable, los enseres eran hermosos y el ambiente era muy familiar. En aquel tiempo les hubiese dado las cinco estrellas que les doy ahora (se las debía), incluso sabiendo que no tenían mucha variedad de productos para comer. Aún así, lo hubiese recomendado sin duda pues era el sitio perfecto para picar algo antes del almuerzo o la cena. Leyendo los comentarios de ahora, hace que me mande las manos a la cabeza. Al parecer este lugar no es lo que era antes, por eso, espero que las personas que lean mi calificación hagan una comparación con la forma en que yo los hubiese evaluado años atrás, y la cantidad de estrellas que se merece actualmente este negocio. A decir verdad, sentí nostalgia y lástima al leer cosas tan negativas. Este sitio marcó un antes y un después en mi vida cuando viví en Madrid. Parece que cambiaron de dueños....no lo sé. =(

Cafeteria - panaderia muy acogedor y tranquilo donde pasar un rato agradable y mientras disfrutas de una pequeña variedad de surtidos salados y dulces que están buenos, tartas, pastelitos y dónde también se pueden degustar tanto diferentes tipos de tés, cafès como otros refrescos. En mi caso la empanadilla de atún estaba muy buena y el té también. El personal es muy amable. Recomendable de visitar.