Sa Romana

Este local te brinda una experiencia en la que te sientes como un cliente importante. La reservacion la hice por teléfono y me atendí Fernando, el chef, con mucha gentileza me dijo que él sería quien cocinaría. Al llegar nos atiende Gal, su hija y luego personalmente se acerca Fernando a responder las dudas y a sugerir los platos según los gustos. Comimos delicioso y la atención magnífica. El lugar y la música muy agradables.

Ha sido una experiencia increíble, servicio impecable, atento, educado e inmejorable. Que decir de la comida, ha sido un espectáculo, rico y sabroso. Buena combinación de alimentos frescos se nota que la comida esta echa con cariño y dedicación. Lo recomiendo, volveremos sin ninguna duda. Hasta la próxima.

Hoy en día quedan muy pocos restaurantes como este. No solamente me he sentido como en casa en todo momento sino que se nota el cariño y el esfuerzo que le ponen a sus platos. Recomiendo mucho la burrata, es la mejor que he probado sin duda y la pasta da igual la que te pidas que te quedarás más que satisfecho. Voy a volver sin duda alguna.

Queremos agradecer la delicadeza, el cariño y la pasión con la que se elabora cada plato, porque cada bocado es una experiencia exquisita equilibrada en cada uno de sus sabores. Si queréis disfrutar de la pasta, tenéis un rinconcito muy bonito en Alcudia, con su pasta tradicional elaborada por ellos de principio a fin. Hemos pedido una ensalada de burrata, unos canelones de pollo, unos funghi de parmesano y de postre un crêpe de dulce de leche. He de decir que no tengo palabras para describir cada bocado… ha sido espectacular. Además, resaltar el trato y el amor de Gal y su papi Fernando que nos han atendido genial, explicándonos cada plato con todos y cada uno de sus ingredientes. Ha sido un placer familia. Sin duda un lugar maravilloso, una familia encantadora y su comida exquisita elaborada de manera tradicional. Un lugar que debéis visitar. Volveremos. Ana & Alberto

La mejor comida italiana en Mallorca, y con bastante distancia. Carta y preparación muchísimo más apasionada que cualquier otro restaurante de la isla. Es una visita obligatoria para las personas que buscan una experiencia auténtica y trabajada. El producto final es inmejorable. El servicio, además, de máxima calidad. Espero volver muy pronto.