Taberna De Triana

En pleno corazón de Triana en una calle semi peatonal. Aparcar cuesta un poco q veces, pero se suele encontrar algún hueco Desde que lo descubrí, vengo cada vez que puedo, y lo recomiendo (ya varios grupos de amigos han celebrado sus reuniones aquí después de hablar conmigo). El ambiente fenomenal, el trato familiar a la vez que profesional y, por supuesto, los platos muy cuidados tanto en la elaboración como en la presentación, y muy buena relación calidad-precio Local con decoración típica sevillana, azulejos antiguos, muros gruesos, parrilla y salón con chimenea decorativa

En el barrio de Triana se encuentra La Taberna de Triana, un lugar en el que se puede comer bien y a buen precio, pero que debe mejorar en accesibilidad. Comimos una fritura de pescado variado, que estaba bien hecha y rica. Nos sentamos en las mesas que había en la calle, porque yo iba en una scooter, de movilidad reducida, y no pude acceder al interior de la taberna ni a los servicios porque había escalones. Si mejoran la accesibilidad, todo el mundo podrá disfrutar de sus ricas viandas.

Fuimos a la hora de la cena en torno las 21:00, nos sentaron nada más llegar porque había muchas mesas libres. El ambiente y decoración es el de casona con típica decoración sevillana. Pedimos media de croquetas de cola de toro, que estaban buenísimas, son 5 unidades no muy grandes pero compensa por la calidad. Un plato de Pavia de provolone, en nuestra opinión lo mejor de todo lo que cenamos , vienen 3 unidades, bastante bien de tamaño. Por último una caldereta de ternera , que estaba muy buena. El único aspecto negativo de la caldereta es que me parece excesivamente escaso de cantidad para el precio del plato. En cuanto al servicio, aunque los camareros son agradables en el trato, no fue todo lo bueno que debería, la comida tardó más de lo que debía, y para la segunda ronda de bebida hasta tres veces tuvimos que pedirla al camarero. Espero que lo del servicio sea algo puntual. Por lo general lo recomendaría.

Un restaurante en una travesía con una carta y un productor espectacular. La comida buenísima y el trato por el señor que atienda en terraza fenomenal al igual que los camarer@s. La fritura variada buenisima El adobo exquisito. Las papas con melva muy buenas El cachopo nos lo recomendó fuera de carta y era un espectáculo el sabor que tenía. Las tortitas de camarones las mejores que he probado en sevilla sin duda. Café muy bueno y los pelotazos que nos bebimos como se deben servir. Una anecdota graciosa de mis amig@s hasta los hielos eran de calidad que no se deshacian con nada. Eramos 4 y salimos a 30€ por cabeza dejando propina. Habéis ganado unos clientes por vuestro trabajo.

El trato fue lo mejor. Desde que llegamos para reservar para un grupo grande 1h antes del almuerzo y nos hicieron hueco sin problema hasta el servicio de los camareros durante la comida. Una taberna decorada con las de antes, con luz tenue y varios salones divididos, que tiene una carta variada, económica y prácticamente todo tenía un gran sabor. A destacar: albóndigas, chupa-chups, coquinas y presa. A evitar: el arroz negr*o, no tenia mucho sabor.