La Espadana

Es un muy buen lugar para ir a desayunar. El desayuno es delicioso, es un lugar muy mexicano. Lo único que no me gusto es que el primer dia que llegamos la espera era de más de 40 mins y la señorita de la entrada se veía como enojada. El segundo dia que si entramos ya no estaba esa persona en la entrada y nuestra experiencia fue muy agradable.

Todos los platillos muy ricos y bien presentados, el lugar es muy concurrido, los fines de semana hay que llegar temprano, a nosotros nos tocó esperar 20 minutos pero escuché que algunos esperaron más de media hora. Yo pedí un omelet espadaña, relleno de verduras y bañado con una salsa cremosa de chipotle sin picante. Lo único que no fue de mi completo agrado fue el café, para mi gusto tiene muy poco sabor, de ahí en fuera todo bien.

Soy de CDMX y llevo 4 meses viviendo en Tijuana, me había rendido en cuanto a la comida ya que ni los “famosos” tacos de asada me parece que tienen buen sazón; hasta que visite este restaurante y puedo decir que es el lugar más rico en el que he comido aquí en Tijuana, buena atención, excelente sazón, las salsas si pican y están deli, el mejor café de olla, buenas porciones, el tiempo de espera es un poco largo pero vale la pena completamente. Gracias y buena vibra a todos los que trabajan aquí.

La atención del personal hacia los comensales siempre atentos y amables. La espera para entrar al restaurante si fue algo largo (40 minutos) la comida estaba buena, tiene buen sazón. Las tortillas de maíz pareciera que las hacen en el momento muy buenas 🤤. A la hora en que fuimos aún tenían desayunos.

Me invitaron a cenar, la atención fue muy buena, pedí milanesa, papas y frijolitos y de bebida limonada mineral muy rica, y de postre pastel de zanahoria y nieve de vainilla, super recomendado 😋 hasta le tome fotos a unas figuras de ahí muy buena su decoración!!! Aplauso a los meseros muy atentos, felicidades 👏 👍 😉

Fui a desayunar y la comida que pedí estaba muy rica, el término de la carne perfecto y con buen sabor (Tampiqueña). La recomendación que me hizo el mesero acerca de los postres estuvo ideal ya que no era nada empalagoso (pay de piña con coco) venía acompañado de helado de vainilla, aunque ese no fue mucho de mi agrado se sentía con textura chiclosa. Lo único que no me gustó fue el café, lo sentí quemado y muy amargo; le tuve que poner azúcar y leche para compensar el sabor, aunque suelo tomarlo solo (como debe disfrutarse). Sin embargo me gustó el lugar, era la primera vez que los visitaba. Como fui temprano no tuve problema en encontrar Parking, aunque el costo del mismo se me hace excesivo (40 pesos la hora) pero si te lo sellan baja a 20 pesos.

Seguro ya van más 20 años que visito este lugar. Primero con mis papás y ahora con mi familia. El lugar tiene comida deliciosa. Mi menú favorito es el de desayuno (recomiendo los chilaquiles y café de la olla) pero he comido muy sabroso también por la tarde. Recomiendo mucho el lugar para venir en familia a disfruta una comida placentera, acompaña de un rato ameno para platicar largo y tendido.

Es un buen lugar muy tradicional para nosotros desde el 2000. Mejoraron en el detalle de la celebración se mira lindo, pero los chilaquiles sufrieron un cambio, no favorable, siguen ricos pero no fue el plato bien servido de siempre, ese detalle por favor que vuelva. El lugar sigue siendo muuuuy recomendable, por lo menos para el desayuno 😋