La Sifoneria Gastrobar

Nos gustó mucho la originalidad de algunos platos, la variedad de la carta y el trato cercano y amable de su personal. Un lugar en el que poder tapear platos caseros y de siempre con toques de vanguardia rodeados de peculiares sifones con historia. Croquetas cremosas, un plato de pulpo sorprendente, y una tierna croca con bien de queso son los platos que destacamos. Aunque por supuesto, la idea de poder probar todos los postres de una sentada nos parece ideal! Para los que como yo, lo pasamos fatal teniendo que escoger es una opción magnífica. @bichifood

Una experiencia magnífica. Una comida exquisita: pulpo a feira, mejillones al vapor, vieiras del Pacífico a la plancha y saquitos de perdiz escabechada, regados con vinos Godello y Albariño y endulzados con torrija con salsa de chocolate y helado de coco. Un lugar excelente para culminar la visita de esta preciosa ciudad. Un buen y recomendable homenaje antes de empezar a recorrer el Camino de Santiago.

Todo riquísimo , los chipirones, los saquitos de perdiz están increíbles , la paella que encargamos , la Mejor que hemos probado nunca . No se puede uno marchar sin probar los postres, un 10, al igual que la atención recibida por Silvia y Carlos, de los pocos sitios de hostelería como Dios manda en Coruña.

Lugar que encontramos en las calles de tapeo de A Coruña. Pequeñito pero acogedor. Trato genial por parte de todo el personal. Comida fantastica: mejillones al vapor, saquitos de codorniz, parrillada de verduras, pulpo... y esa tapita de huevo de codorniz frito con pimentón que te ponen con la bebida. Totalmente recomendable.

Deliciosa la comida y muy buena atención. En cuanto a la comida, ordené unos saquitos que estaba bien hechos, estaban fritos y de relleno cremoso, excelente decorado, luego un pollo con salsa de naranja y verduras tempura que estaba muy delicioso, dulce y ácido pero en toques perfectos, y por último, el postre, no muy dulce, justo para el antojo al final, el brownie de cerveza negra espectacular y el helado muy bueno. En cuanto a la atención el mesero rubio estaba guapo, saludos y el chef, que linda barba.

Situado en la calle Franja, cerca de la Plaza de María Pita, es un lugar fenomenal para comer. Fuimos por la noche a cenar previa reserva. El trato fue muy agradable, tanto por los camareros como por los cocineros. Nos recibieron con un aperitivo cortesía de la casa. Nosotros pedimos unas setas de cardo empanadas con alioli, saquitos de perdiz escabechada, mejillones al vapor y chipirones a la plancha. Nos sorprendieron los saquitos. Siendo caza, no estaban fuertes de sabor. También nos dieron a probar su ensaladilla atlántica, que estaba exquisita. De postre, bizcocho de cerveza negra con helado de queso. Impresionante!!! Para beber, cerveza y copa de vino. Precio, 51 euros. Resultado: estaba todo riquísimo y un trato super agradable. Dar las gracias a Carlos y Silvia por su acogimiento y a su equipo por su dedicación y su buen servicio. Volveremos!!!!

Más qué grata sorpresa este lugar en el corazón de La Coruña. Mestizaje original y esmerado de los ricos clásicos gallegos con los sabores propios de la también magnífica cocina de otras regiones del interior de España, como la de Madrid y Extremadura, de donde provienen los dueños de este negocio. Ellos, Carlos y Silvia (chef y jefa de sala), nos atendieron de manera ideal, amabilísimos. Cocina y servicio van de la mano, de diez. Productos de primera calidad, tanto mariscos (es lo esperado) como las carnes, sin duda. Buenos precios. Ambiente elegante, pero natural y sosegado. Lejos del pijerío y la ostentación, lo cual valoro mucho viendo cómo está este mercado. Hostelería de verdad. Me ha encantado.

Paseando por el centro, pasamos por la puerta del bar y viendo que había sitio, decidimos entrar a cenar. Habíamos estado un par de veces tomando algo y los pinchos que ponen son riquísimos pero no pudimos quedarnos a comer porque en ambas ocasiones estaban llenos. Pero esta vez, si! Tienen tapas y raciones elaboradas y diferentes, todas muy ricas. Nosotros probamos las croquetas, la ensaladilla Atlantica y los saquitos de perdiz escabechada. Estos últimos, por recomendación de la camarera, ya que nos dijo que era su plato destacado, ¡y no me extraña! ¡porque estaban deliciosos! De postre compartimos un bizcocho de cerveza negra. Súper recomendable! La amabilidad y el servicio del personal están a la altura de la calidad de la comida. Enhorabuena a todo el equipo de la Sifoneria. Repetiremos seguro!