Restaurante Tívoli

Local muy acogedor, pegado a la calle Laurel pero muy tranquilo. Atención estupenda por parte de la camarera. Comimos tres menus, con una relación calidad precio insuperable. A destacar el bacalao en tempura con piparrada (buena materia prima y mejor elaboración) o la tarta de queso casera. Y todo regado con generosas copas de crianza. Por 17,90 euros no se puede pedir más. Muy muy recomendable.

Establecimiento muy bien ubicado en la Calle Breton Herreros en pleno centro de Logroño, muy bien situado para hacer una parada y descanso tranquilo. La atención muy buena por parte del personal que nos atendió (nos tocó el doble de Salt Bae), los baños en perfecto estado. Refresco a 2,30 €, y el café a 1,40 €. Es una buena parada para los viajeros que pasen por la ciudad, no hay fallo con el lugar y te puedes mover por todo el Centro de la ciudad. Puedes llevar a la suegra, desde aquí la paseas con unos pinchos por la zona y tan contenta.

Muy céntrico, en la entrada a la calle Laurel, con una atractiva barra de bar con novedosos pinchos y raciones. Es otro exitoso bar como son los Noche y Día que encontramos en Logroño. La oferta es variada y divertida, de buena calidad y materias primas, buena selección de productos, presentados con un estilo creativo e innovador.

Tomamos el menú del día: dos platos más postre o café, agua o copa de vino crianza por 14.9€. Lo escogimos porque el resto de restaurantes de la calle laurel estaban llenos a reventar de gente. El local es tranquilo y la decoración es moderna. Tal vez subiría las lámparas que hay sobre las mesas (dan mucha calor). La comida estaba deliciosa, sobretodo las alubias con jamón y chorizo (plato del día) y el ajoarriero con langostinos (los langostinos no estaban por ninguna parte, pero aún así estaba bueno). Lo peor fue el servicio, pues sólo había una chica en cocina y otra sirviendo y atendiendo la barra y, aunque han sido amables, el tiempo de espera ha sido importante. Algunos comensales de otras mesas se han levantado y se han ido antes de pedir, debido a la larga espera.